información recogida de: primerafuente.com.ar (25/07/07)

El reclamo antiminero de indígenas y ambientalistas se hizo sentir en el Congreso de la Nación



	Desde Tucumán, una numerosa comitiva expresó su rechazo a Minera Alumbrera.

Desde todo el país, agrupaciones sociales de diversa índole confluyeron para nacionalizar la protesta contra las explotaciones mineras a cielo abierto. Reclamaron la inmediata derogación del Código Minero actual y la caída de todos los permisos para explotaciones a cielo abierto. Instan a levantamientos populares frente al avance de los negociados entre las multinacionales mineras y el Gobierno. Representaron a Tucumán varias organizaciones sociales e indígenas.

Cientos de integrantes de agrupaciones ambientalistas y defensoras de derechos humanos, acompañados por manifestantes de partidos de izquierda y por una nutrida delegación de habitantes de pueblos originarios, participaron ayer de una histórica protesta frente al Congreso de la Nación en repudio al Código Minero vigente, sostén legal de la depredación ambiental y económica que padecen quienes habitan bajo influencia de las explotaciones mineras a cielo abierto dispersas por todo el país.

Provenientes desde los principales centros urbanos hasta los poblados más recónditos, los manifestantes confluyeron en torno al Congreso para exigir que se dé curso al proyecto de ley tendiente a modificar el cuestionado Código Minero (nacido en pleno apogeo de la era menemista). La iniciativa, según su autor, el diputado Carlos Tinnirello (Redes), permanece “dormida” en el seno de la comisión de Minería de la Cámara Baja, donde prevalece una neta mayoría oficialista. “Esto sucede por que tanto (Néstor) Kirchner como (Carlos) Menem mantienen sus propios negocios con las multinacionales mineras que arrasan poblaciones enteras por toda Argentina”, acusó el parlamentario porteño en diálogo con primerafuente.

Básicamente, los principales reclamos que se exclamaron en el salón auditorio anexo de Diputados, donde se congregaron referentes de las organizaciones presentes, se fundamentaron en la modificación de la mencionada ley minera y la caducidad de todos los acuerdos alcanzados entre la Nación y las provincias con las firmas mineras para explotaciones abiertas de yacimientos.

Allí, uno de los oradores más efusivos fue el cineasta y político contestatario Fernando Pino Solanas quien reclamó una concientización social frente al saqueo de las mineras multinacionales. “Se lleven nuestras riquezas dejando contaminación y muerte. Nos están estafando. Debemos seguir el ejemplo del pueblo de Gualeguaychú que mediante su lucha aportó otro concepto en defensa de la vida”, afirmó Solanas.

Entre las delegaciones de todo el país, también se halló una nutrida comitiva de ambientalistas e integrantes de comunidades originarias de Tucumán quienes, junto a representantes de ONGs de todo el NOA, centraron sus reclamos en el impacto causado por Minera Alumbrera en Catamarca y las profundización de la delicada situación una vez que se ponga en marcha el emprendimiento minero de Agua Rica, otro megaproyecto aún más ambicioso que el primero.

Tras las exposiciones, las delegaciones realizaron un banderazo frente al Congreso donde se desplegó una enorme bandera argentina y un gran número de huipalas (bandera identificatoria de la nación diaguita), a la vez que se extendieron pancartas con proclamas de lucha y repudio.

Desde las diferentes representaciones sociales se concluyó con que, más allá de la política minera que encara en Gobierno nacional, lo que echa por tierra cualquier posibilidad de alterar al polémico Código Minero, la alternativa frente al avance de las explotaciones de las multinacionales se intensificará en torno a levantamientos populares que depongan los acuerdos mineros entre sectores empresariales y el gobierno. Los pueblos de Esquel y Famatina son un ejemplo de ello.